La diabetes gestacional es una intolerancia a la glucosa que se produce durante el embarazo. Para que esta aparezca no es necesario haber tenido diabetes antes del embarazo, y tampoco implica que lo tendrás cuando este finalice, pero sí supone un aumento del riesgo de padecer diabetes tipo 2 en el futuro.
En esta nota te contaremos qué es la diabetes gestacional y todo lo relacionado con este tema tan importante.
Imagina que tu cuerpo no puede utilizar los azúcares y almidones que obtienes de los alimentos que consumes para producir energía, y debido a ello, el azúcar se va acumulando hasta llegar a altos niveles. Con la diabetes en el embarazo ocurre lo mismo, se produce un alto índice de glucemia debido a que algunas de las hormonas presentes durante el embarazo dificultan el trabajo de la insulina (permitir que la glucosa sea aprovechada como energía) alterando el metabolismo de los HC y elevando la glucosa.
En algunos casos, la diabetes gestacional (DG) puede afectar a una mujer en más de un embarazo, es por ello que debe tratarse bajo supervisión médica, ya que en caso de no hacerlo podría provocar:
Entre 1 de cada 50 y 1 de cada 20 mujeres embarazadas presentarán síntomas de diabetes gestacional según el Centro de Enfermedades, Control y Prevención CDC por sus siglas en inglés. Y aunque la causa no está definida, se considera que el sobrepeso o antecedentes familiares de diabetes podrían tener algo que ver.
De hecho, para un estudio realizado en el Hospital General Plaza de Salud y llevado a cabo entre los años 2015 y 2020, se revisaron las historias clínicas de 61 mujeres embarazadas que presentaron diabetes gestacional, y como resultado se demostró que el 49% de ellas tenían obesidad, el 25% sobrepeso y solo el 26% no sufrían ninguna de las dos.
Desde su diagnóstico hasta la finalización del embarazo es cuanto dura la diabetes gestacional, aunque en algunos casos esta puede ocasionar el posterior desarrollo de diabetes tipo 2; y la mayor parte de las mujeres no presentan síntomas perceptibles más allá de aumento de sed y aumento de las micciones a consecuencia. Es por ello que el médico es el encargado de realizar una prueba diagnóstico entre la semana 24 y 28 de gestación, como parte de la atención prenatal.
Si presentas DG debes monitorizar tu glucemia capilar de modo que sea igual o inferior a 95, 140 y 120 mg/dl antes de las comidas y a los 60 y 120 minutos de las mismas. En este escenario, el estilo de vida que se recomienda es:
También se recomienda seguir una dieta para diabetes gestacional, realizar ejercicios, hablar con el médico en el caso de planificar más hijos a futuro y realizarse un análisis para descartar diabetes incluso después del parto (después de 6 meses).
Así que ya lo sabes, es importante realizar una prueba para descartar la diabetes durante el embarazo, especialmente por los escasos o poco precisos que son los síntomas de diabetes gestacional. Finalmente, recuerda que siempre y cuando se respeten las indicaciones médicas y se cumpla el tratamiento, este tipo de diabetes puede ser incluso más fácil de controlar que la diabetes preexistente.
¿Encontraste valioso este artículo?
Tu opinión es muy importante para nosotros, nos permitirá en un futuro entregar contenido actualizado a las últimas investigaciones y tendencias relacionadas con el embarazo.